TÚ, MÁS QUE MÁS

Tú con tus ojos,
oblicuos deseos de la carne,
humeantes falsedades encontradas,
absortas realidades siempre ausentes...
Tú, más que yo,
más que nuestros propios encantos,
más que los parciales deslices de los cuerpos,
más que el mar y el infinito helado...
Tú, más que la distancia,
más que el río candente que desemboca en mi cuello,
más que el incendio vivo de tus labios,
más que tus piernas y el eco de tus pasos...
Tú con tus manos,
ardientes roedores en mi cuerpo alado,
constantes suplicios en mi adentro,
pueriles fantasías en silencio...
Tú, más que nadie,
más que cualquiera, más que todo,
más que los caminos recorridos,
más que la desdicha del sonido...
Tú, más que el sueño,
más que el cambio del mundo,
más que mi voz que mece tu cabello,
más que la nostalgia, más que el viento...